Sinopsis

Imagine un restuarante al que acuden a comer los mejores chefs y los gourmets más exigentes para desgutar el mejor producto.
ese restaurante se llama La Tasquita de Enfrente.

Juanjo se ha granjeado, plato a plato, el mayor de los respetos con una máxima: la sencilla desnudez.

En este libro se desvelan los entresijos de un restaurante único, de un sector camaleónico y de un oficio mágico en clave de literatura culinaria.

La reflexión y la gastronomía van de la mano en esta obra.

De lo que hoy es todo un templo gastronómico en el que se rinde culto al producto, nació una obra diferente. Un autor diferente. ¿Cómo adentrarse en la mente de uno de los mayores guardianes del sabor? Liberándonos de ataduras. Las distancias cortas son las que definen el pensamiento de alguien. Era el momento en el que La Tasquita de Enfrente tuviera el protagonismo real que merece en forma de libro. Un libro escrito en primera persona por Juanjo López.

Este hombre bueno, culto y formado que llegó a dirigir una prestigiosa compañía de seguros, fue fiel a la sangre. Tras el fallecimiento de su padre –al frente del restaurante– decidió abandonar su vertiginosa vida profesional para, con 40 años, reinventarse y ver los toros desde la barrera. Hoy, La Tasquita de Enfrente vive su mejor momento tanto a nivel culinario como a nivel filosófico. Lean esta obra sabiendo que quien la escribe ha comido en los mejores restaurantes del mundo. Y son precisamente esas vueltas al mundo lo que le confieren la potestad de... ¿estar vuelta de todo? Gocen de las palabras de Juanjo López.
Sobre el autor

Juanjo López se educó entre fogones. Y, a pesar de ello, su profesión tenía poco que ver con la hostelería y la restauración. De hecho, llegó a dirigir una compañía de seguros. Eso sí, era (y es) todo un amante de la gastronomía. Dedicaba gran parte de su tiempo libre a viajar y a comer. Eso lo dotó de un gran paladar, de un refinado gusto y de una abultada memoria gustativa. Hace 20 años, tomó las riendas de La Tasquita de Enfrente. Su padre ya llevaba otros 30 trabajando en el local.
Sobre el restaurante

Lo que hoy es todo un templo gastronómico en el que se rinde culto al producto, nació como una casa de comidas en una de las zonas más castizas de Madrid. La Tasquita de Enfrente, frente a la primitiva La Gran Tasca, ofrecía platos con memoria y sabor. Entre ellos se encontraban las patatas a lo pobre… y los callos. Hoy en día, Juanjo sigue cocinándolos, ya rebautizados como ‘Callos Gaona’, en honor a su padre.

Índice

Prólogo de Risto Mejide
El lujo
Mi Madrid
Nicho
Honestidad
Magia
Hacer pensar
Equipo
Vino
Atemporalidad
Tamaño
Esencialidad
Creaciones: La sencilla desnudez