Edwards, L.
Datos técnicos
No existe ninguna subespecialidad concreta que se dedique en exclusiva al estudio y tratamiento de las enfermedades genitales. Algunas de estas afecciones, son reclamadas por ciertas especialidades. Por ejemplo, la candidiasis vaginal por la ginecologÃa y la psoriasis genital, por la dermatologÃa. A pesar de ello, ninguna especialidad está orientada para diagnosticar y tratar enfermedades genitales en general. Los médicos reciben formación para ser capaces de reconocer y tratar las más habituales. En la mayorÃa de los casos, no se les enseña a realizar un diagnóstico diferencial, ni el modo de evaluar a un paciente con una afección genital sin sÃntomas especÃficos o antecedentes familiares. Además, las enfermedades cutáneas, se muestran atÃpicas cuando se generan en los pliegues de la piel o en los genitales. Las escamas normalmente no se aprecian, el eritema a menudo parece leve, incluso cuando existe una inflamación significativa y normalmente las enfermedades cutáneas bien delimitadas muestran bordes poco definidos. Debido a ello, el diagnóstico y evaluación de los pacientes que padecen este tipo de enfermedad, resulta difÃcil para la mayorÃa de los profesionales de la salud, haciendo necesarios más recursos. Esta obra ha sido elaborada por médicos internacionalmente reconocidos y está diseñada para cubrir esa necesidad, desde un enfoque puramente dermatológico. Los dermatólogos normalmente diagnostican por la apariencia. Por lo tanto, este atlas se organiza según el aspecto más que por la fisiopatologÃa. Por ejemplo, todas las lesiones que presentan un color blanquecino se han agrupado para que puedan compararse todas ellas mediante la descripción de los sÃntomas y las imágenes. Las fotografÃas muestran las manifestaciones más comunes de estas enfermedades, en lugar de los casos más graves o poco frecuentes. AsÃ, el lector tiene una referencia que le permitirá comparar enfermedades similares, para realizar un correcto diagnóstico diferencial. Muchas enfermedades cutáneas se manifiestan de diversas maneras y se incluyen por tanto en varios capÃtulos. El liquen plano, por ejemplo, puede aparecer como pápulas blancas, erosiones, pápulas rojas o placas. Otras veces sólo aparece en el interior de la vagina, presentándose como vaginitis inflamatoria. Por consiguiente, el liquen plano se incluye en todos estos capÃtulos. El análisis principal de una enfermedad, aparece en el capÃtulo en el que se muestra su presentación más tÃpica. En caso de poderse incluir en algún otro, la descripción serÃa más breve. El tratamiento en el área genital a menudo tiene que modificarse, porque la aplicación de cremas en esa zona puede producir escozor y, secundariamente, infecciones, especialmente en la vagina, lo que puede complicar el tratamiento. Estos son los dos únicos aspectos que se estudian dentro del capÃtulo sobre técnicas y tratamiento. Algunas dolencias son más frecuentes en niños o en pacientes inmunodeprimidos y en estas circunstancias, la morfologÃa puede variar. Estos casos son tratados en capÃtulos especÃficos. Esperamos que encuentren útil este libro y alimente su interés en esta especialidad, que es tan necesaria y sin embargo tan poco reconocida.